Los elasmobranquios son un elemento esencial del medio marino. Su papel como depredadores en la cadena trófica es crítico para el mantenimiento de un rico y estable ecosistema. Especialmente frente a la amenaza que el cambio climático supone. Si queremos mejorar la resiliencia de nuestros ecosistemas debemos aumentar los conocimientos sobre este grupo y avanzar en su conservación. El gatvaire (Scyliorhinus stellaris) es un tiburón demersal, propio del coralígeno entre los 40 - 80 metros de profundidad. Está catalogada en el Libro Rojo de los pescados de las Islas Baleares como “En peligro”, pero no es una especie protegida, cosa que lo exime de tramitaciones administrativas complejas. Pero todo el conocimiento adquirido servirá para establecer programas de recuperación de especies más

sensibles con menores riesgos y costes. Siguiendo la estela del “Proyecto de recuperación de poblaciones de elasmobranquios demersales en las Islas Baleares 2023- 2025”, el objetivo de este nuevo proyecto será enriquecer el conocimiento general sobre los trabajos experimentales ya emprendidos. En particular en dos nuevas áreas: La caracterización genética de las poblaciones y la monitorización de individuos criados en cautividad y liberados al medio marino. La secuenciación genética de los alitanes servirá de base sobre la que establecer una monitorización continuada de estas comunidades, que permita detectar cambios antes de que los potenciales impactos sean evidentes. Mientras que la monitorización de la cría en cautividad y su posterior liberación aportará información clave para futuros planes de repoblación y gestión de esta especie. La mayor parte de los alitanes en el LIMIA se han beneficiado de un programa de enriquecimiento ambiental promoviendo su comportamiento natural y su bienestar en cautividad, y su seguimiento mediante telemetría acústica una vez liberados permitirá obtener información importante respecto a los beneficios de este proceso.